domingo, septiembre 11, 2016

Esa amiga, llamada Soledad...

Para muchos existe la creencia de que estar solo o sentirse solo es algo dramático. Los seres humanos somos sociales por naturaleza, y es una de las razones por la que nos gusta sentirnos acompañados y sentir que le importamos a alguien. Un día, alguien tildó a la "soledad" de mala compañera, con muchas probabilidades de que haya sido ese mismo que prefirió quedarse solo. Quizás, pero yendo mas allá de elucubración alguna, lo que por experiencia en mi propia vida y en muchas de las personas que he podido conocer, he llegado a la conclusion, que la "soledad" se presenta un día de visita bien sea porque fue invitada o irrumpe así nada mas. En ese momento puede cambiar nuestra percepciones de la vida,  porque esa amiga especial,  siempre nos dira la verdad, esa que nos dice las cosas como son y duele porque nos llega a la fibra mas profunda haciendo tambalear los muros que edificaron los miedos y dando paso al amor. Al amor por sí mismo y obviamente al entorno. Aunque parezca lo contrario. Tu vida tiene una misión y un significado. Encuentra cuál es y tenlo muy claro.  Piensa que no estás aquí solo para llenar un espacio o ser la escenografía de una obra de teatro.  De hecho, nada sería igual si tú no existieras.
Por eso tu mismi debes dar el primer paso para ser feliz. La persona descontenta pasa el doble de tiempo pensando en lo que le causa infelicidad y sigue haciendo lo que le molesta.  En cambio, quienes se sienten felices, se permiten serlo, valoran las pequeñas cosas y buscan apoyo en información que las lleve a llenar su vida de colores y sentido. Posiblemente entonces la soledad decida abandonarte y cambiarte de nuevo la vida

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