Posiblemente mi vida y mi situación personal sea un desastre en todos los sentidos de la vida, pero no por ello dejare de luchar por lo que creo y daré mi opinión pese a quien le pese, aunque eso haga que los enemigos crezcan. Tener enemigos es una razón por la que sabes que estas vivo. Una vez muerto, incluso tus enemigos hablan buen de ti, aunque sea en el tanatorio. Sencillamente quien pretende ser honesto consigo mismo y con los demás, aunque deba pensar lo que dice, no debe dejar de decir lo que piensa; al menos sobre las cuestiones que el crea relevantes. Aunque, por ello, se complique la vida y se cree enemigos. No debemos tener miedo a tomar la palabra cuando se trate de defender tus sentimientos, tus opiniones... debes luchar por ellos contra los molinos de viento de los intolerantes. Aunque sorprenda tu voz, tus escritos esa lucha es tuya y solo tuya. Los demas deben respetarla, si quieren ser respetados. Por eso me acuerdo más de una vez del chiste de una persona que, metido en su ataúd, gritaba:
- "María, María, que estoy vivo!"
La viuda le replicaba, mientras intentaba cerrar la tapa del ataud:
- "Anda, Manuel, ¡vas a saber tú más que el médico!"
Porque solo los vivos podemos luchar contra los elementos y las piedras que nos ponen en el camino de nuestra vida y siempre hay que actuar con honradez, no intentado ser lo que no eres, si te parieron asi, así deberas morir
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