Solo un vacio

¿Qué se puede hacer,
cuando la desolación
ya anidó en mis sentidos?
Cuando la Dama de Negro salió victoriosa,
cuando mis sentimientos
se baten con la tempestad del mar de los desechos,
cuando el trinar de los pájaros,
ya no entonan sus viejas melodías,
cuando el cansancio se confunde entre mis pasos,
sólo recuerdos, sueños sin compañía,
me entrego, debo aceptarlo, solo habra libertad
para aquellos que aún aman y que tienen compañía
Cántico olvidado en mis mañanas,
sin su voz risueña, mi vida es una morada vacía,
los paisajes ya no son campos,
ni sol, ni arboleda, solo el laberinto de asfalto que inunda la ciudad.
No encuentro la salida, que me atrapó otra vez,
en una soledad y en el camino sin esperanzas.
Un camino sin retorno, un camino turbulento,
una soledad vacía, donde cada día habre de esperar
a la noche para compartir de nuevo mis sueños y mis ilusiones
¡Oh! victoriosa Señora de Negro,
hasta cuando me mantendra atrapado mutilando,
mis sueños con hondas puñaladas,
hasta cuando hundira su guadaña en mis heridas?…
Dolor infame que apesadumbra mi alma,
y la cubre de noche oscura,
sin salida, ni una luz que la ilumine
en el camino de la vida
Hace frío, ya es tarde cuando escribo los pensamientos más profundos,
de mi alma atormentada.
Mis ojos ya no lloran, ni mi pecho suspira,
ni mi mente se torna fría para esconder muy dentro del alma,
el dolor saberse amado y que ella no volvera,
solo la esperanza de la eternidad
puede alumbrar ese camino de infinita soledad