Cierto día complaciendo la petición que su hijo le hizo, como
regalo de cumpleaños lo llevó al lugar donde trabajaba, para que fuera y
viera como era, ese lugar era una cueva.
El hombre y el pequeño entraron, caminando lentamente; el niño estaba fascinado de ese lugar, miraba para todos lados, tenía una mezcla de temor, curiosidad y alegría.
De repente, el niño tropezó con una piedra, y esta cayó, produciendo un sonido repetido, oyó el eco:
- ¡pun!,¡pun!,¡pun!
El pequeño estaba maravillado por lo que había escuchado, y preguntó:
- "¿Papi, que es eso?".
El padre sonrió, mas no dijo nada. El niño rápido busco otra piedra y la lanzó, y nuevamente escucho el ruido repetidamente; miró al papá con picardía, se voltio y emitió un grito:
- "¡AAAAAAAH!"
El "milagro" volvió a ocurrir el sonido se repetía. Esta vez, el niño gritó algunas palabras:
- "Feo, malo, tonto, horrible", y las palabras se repitieron.
El joven se volvió hacia su padre y preguntó:
- "Papi, ¿no me vas a decir que es eso?.
El padre sonrió, mirando con amor a su hijo y caminó junto a este. Le dijo:
- "Escucha: ¡Hermoso, maravilloso, estupendo!", y las palabras se escucharon otra vez".
El niño le dijo:
- "No, entiendo, ¿qué es?".
El padre lo tomó de la mano y le contestó:
- "Eso, hijo es la vida, así como la llames ella te va a contestar".
El hombre y el pequeño entraron, caminando lentamente; el niño estaba fascinado de ese lugar, miraba para todos lados, tenía una mezcla de temor, curiosidad y alegría.
De repente, el niño tropezó con una piedra, y esta cayó, produciendo un sonido repetido, oyó el eco:
- ¡pun!,¡pun!,¡pun!
El pequeño estaba maravillado por lo que había escuchado, y preguntó:
- "¿Papi, que es eso?".
El padre sonrió, mas no dijo nada. El niño rápido busco otra piedra y la lanzó, y nuevamente escucho el ruido repetidamente; miró al papá con picardía, se voltio y emitió un grito:
- "¡AAAAAAAH!"
El "milagro" volvió a ocurrir el sonido se repetía. Esta vez, el niño gritó algunas palabras:
- "Feo, malo, tonto, horrible", y las palabras se repitieron.
El joven se volvió hacia su padre y preguntó:
- "Papi, ¿no me vas a decir que es eso?.
El padre sonrió, mirando con amor a su hijo y caminó junto a este. Le dijo:
- "Escucha: ¡Hermoso, maravilloso, estupendo!", y las palabras se escucharon otra vez".
El niño le dijo:
- "No, entiendo, ¿qué es?".
El padre lo tomó de la mano y le contestó:
- "Eso, hijo es la vida, así como la llames ella te va a contestar".