martes, febrero 10, 2015

Cuatro Principes Reales (http://parapensarenti2.blogspot.com.es/)

Cuatro príncipes querían especializarse en algo en lo que no hubiera nadie que pudiera igualarlos. Se dijeron uno a otro:

- "Vamos a recorrer el mundo y a aprender la ciencia más difícil".

Así, los cuatro hermanos se pusieron de acuerdo en un sitio para volver a encontrarse después del viaje y se marcharon cada cual en distinta dirección.
Pasó el tiempo. Después de un año, un mes y un día los cuatro hermanos se encontraron en el lugar establecido y se preguntaron uno a otro las cosas nuevas que habían aprendido. El primero dijo:

- "Yo he aprendido una ciencia que me permite, con solo un hueso de un ser viviente, hacer brotar en el acto la carne que lo recubra".
 
- "Yo, dijo el segundo, sé cómo hacer crecer la piel de se ser e incluso hacerle brotar pelo, si el hueso se encuentra ya cubierto de carne.
 
El tercero dijo: 
- "Pues yo puedo crear sus miembros -manos y pies- si tengo los huesos, la carne y la piel".

- "Y yo, concluyó el cuarto, sé como darle vida a esa criatura, si se encuentra ya completa con todos sus miembros.

Entonces los cuatro hermanos se dirigieron al bosque para buscar un trozo de hueso que les permitiera demostrar su respectiva habilidad. No fue difícil. A los pocos pasos encontraron un hueso y lo recogieron.
No se preocuparon de saber a qué clase de animal pertenecía. Estaban tan embebidos en su ciencia que ni siquiera se les ocurrió pensar en ello.
El primero hizo brotar la carne en el hueso; el segundo lo recubrió con piel y con pelo; el tercero lo completó con los miembros correspondientes y el cuarto dio via a... ¡un león! Agitando su espesa melena, la fiera dio un rugido, entreabrió sus fauces amenazadoras de colmillos afilados y saltó sobre sus creadores con las garras desenfundadas.
Los mató a los cuatro y se perdió satisfecho en la jungla. 

Bruno Ferrero

 

Frase del Día (10-02-2015)

En ocasiones no es suficiente con la voluntad sino que se debe contar con los medios suficientes, como sucede cuando se pretende hacer daño a alguien.
Por desgracia nos pasamos la vida ofendidos por lo que nos puedan haber dicho, nos puedan haber hecho, o por lo que puedan pensar de nosotros y esto solo sucede porque les damos poder a todos los demás y dejamos de creer en nosotros mismos. Es como si lo que viene de fuera tuviera más importancia, más credibilidad, mas autenticidad que lo que pensamos de nosotros mismos. No debemos tomarnos las cosas de manera personal, sino estamos dando la razón a quien nos dice  o hace. En esta situación, en la que nos creemos continuamente ofendidos, nuestra vida se vuelve irritable y terminamos viviendo en continuo conflicto, intentando justificarnos de forma continua por demostrar a todos los demás que somos dueños de la razón y que los otros son los mentirosos y equivocados. Cada uno vive la vida como le han enseñado y tiene la educación que ha recibido en casa... Esa es la diferencia