domingo, agosto 16, 2015

Las liebres y las ranas (http://edyd.com/fabulas/esopo)

En un claro del bosque, se juntaron una tarde las liebres para expresar su gran tristeza por la vida tan insegura que llevaban. Todos los animales, entre los que se encontraban las águilas, los perros e incluso el ser humano se pasaban largas jornadas detrás de ellas para comérselas o acabar con su existencia. Hartas de vivir así, acordaron dejar de existir y descansar para siempre en un lugar en el que no existiera el miedo.
Sin perder un solo minuto, todas corrieron hacia el estanque que estaba a muy pocos metros de allí, para lanzarse en sus aguas y hundirse hasta lo más hondo.
Al escuchar las ranas el ruido que las patas de las liebres producían, se asustaron tanto, que comenzaron a saltar al interior del estanque para buscar refugio en sus aguas. Dándose cuenta de lo que estaba sucediendo, una de las liebres les dijo a las demás:

- "¡Quietas compañeras! No debéis tomar ahora mismo una decisión tan precipitada, pues a juzgar por el comportamiento de las ranas, hay otros animales que se asustan más fácilmente que nosotras!"

Frase del Día (16-08-2015)

Si no le ves sentido a la vida, es que sencillamente no le has pillado para nada el sentido a la vida. El sentido de la vida es disfrutarla, cada día como si fuese el último de tu vida. Nosotros somos los que conducimo ese "vehiculo" por senda que creemos es vital para nosotros. No es algo que te ocurra, porque sí, a no ser que cometas el absurdo error de abandonar tu puesto como conductor principal. Si te encuentras en esta situación, no te sientas mal. Todos cometemos ese error en algún momento. Todos olvidamos que estamos a cargo de nuestras propias vidas y que nuestra experiencia vital está en gran medida bajo nuestro control. Pero lo cierto es que vivimos por elección propia. Si piensas que no controlas tu vida es porque has elegido soltar los mandos. ¿Qué pasa cuando sueltas los mandos de un vehículo en movimiento, como un coche cuando conduces? Que se comporta de modo imprevisible y eso nos pasa cuando dejamos de llevarla por lo caminos en los que creiamos llevarla...