domingo, agosto 14, 2016

La meditación...

La meditación tiene como principio fundamental la búsqueda de la felicidad. Se trata de una determinación, una forma de vida que toma el meditador. El estado meditativo, en un ambiente especial, lleva a una condición de bienestar, que el practicante busca reproducir en la vida cotidiana.
Para esta persona, la felicidad no está en los años, meses, en las semanas, ni siquiera en los días. Solo se la puede encontrar en los momentos. Hoy es el mañana de ayer. Para aprender a meditar no necesitamos nada especial, sólo tenemos que dedicar algunos minutos a pensar y reflexionar sobre lo que nos molesta o entristece para mejorarlo y ser más felices. Y mientras meditamos, lo que hacemos en realidad es entrar en la parte más profunda de nuestro ser. La meditación es como ir hasta el fondo del mar, donde todo está quieto y tranquilo. Aunque en la superfície, puede haber multitud de olas, pero bajo el mar no te veras afectado. En el fondo de tu ser como en las profundidades de mar todo es silencio. Nada ni nadie puede afectarte. La meditación silenciosa es algo totalmente distinto a todo o que conozcamos. Cuando comenzamos a meditar en silencio, sentimos el fondo de un mar dentro y fuera de nosotros. La vida de actividad, movimiento e inquietud está en la superfície, pero abajo en la profundidad por debajo de nuestra vida humana, hay equilibrio y silencio. Imaginamos este mar de silencio en nuestro interior, o sentimos que no somos sino el mar de silencio mismo. Porque guardar incluso un silencio externo, es más difícil de lo que podríamos imaginar. Pero, sorprendentemente es mucho más difícil  mantener la ausencia de pensamiento en nuestro cerebro, que ese minuto de siencio oral.

Frase de Día (14-08-2016)

No voy a negarlo, es muy desagradable y doloroso cuando tomas una decisión, de una ruptura. Además, en la mayoría de los casos, cuesta aceptar que eres "a quien han dejado" a a persona amada. Pero, aunque el camino para olvidar es cruel, ya sabes que todo ave fénix resurge de sus cenizas. 
Por eso debe importarte, porque esa fue decisión tuya. En el caso de que hubiera procedido de la otra persona, no dejara de ser una ruptura y entras en un estado de confusión y entras en una desorientación en la que no sabes qué hacer con tu vida ni a dónde ir . Veras que no es fácil aclarar tus ideas y darte cuenta de que ya no sientes lo mismo por la otra persona. A veces hay quienes, para protegerse, entran en un estado de frialdad para no dejar pasar las emociones y poder hacerlo más fácil.

Los Cuatro Monjes

Una vez cuatro monjes que decidieron, que a modo de disciplina espiritual, mantener un dia de silencio. De esa manera podían estar más enfocados y concentrados, no gastar su energía en charla trivial o entrar en discusiones inútiles.
Bueno, todo iba bien a lo largo del día. Ellos iban a hacer sus tareas sintiéndose muy virtuosos y mostrándose gran respeto mutuamente. Entonces, al atardecer, comienza a oscurecer, y uno de los monjes, que está muy ocupado preparando la cena, dice:
- "Alguien debería encender la lámpara".
El segundo monje se vuelve hacia él y le dice:
- "¡Has hablado!"
El tercer monje dice:
- "¡Callaos los dos!"
Y el cuarto monje dice:
-"¡Ahora soy yo el único que no ha roto el voto de silencio!"