Antes de que cualquiera de los asistentes lo interrogara, inició Beremiz la siguiente historia:
- "Había una vez una hormiguita que, caminando por el mundo, encontró una gran montaña de azúcar. Emocionada con su descubrimiento, separó un grano y lo llevó al hormiguero.
- ¿Qué es esto?, le preguntaron sus compañeras.
- Esto, contestó, orgullosa, es una montaña de azúcar. La hallé y decidí traerla al hormiguero".
Y añadió Beremiz con una vivacidad muy fuera de su habitual placidez:
- "Así se comporta el sabio vanidoso. Trae una piedra recogida en el camino y dice que lleva el Himalaya. La Ciencia es una gran montaña de azúcar, de la que sólo conseguimos extraer insignificantes trocitos".
- "Había una vez una hormiguita que, caminando por el mundo, encontró una gran montaña de azúcar. Emocionada con su descubrimiento, separó un grano y lo llevó al hormiguero.
- ¿Qué es esto?, le preguntaron sus compañeras.
- Esto, contestó, orgullosa, es una montaña de azúcar. La hallé y decidí traerla al hormiguero".
Y añadió Beremiz con una vivacidad muy fuera de su habitual placidez:
- "Así se comporta el sabio vanidoso. Trae una piedra recogida en el camino y dice que lleva el Himalaya. La Ciencia es una gran montaña de azúcar, de la que sólo conseguimos extraer insignificantes trocitos".
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