
Un herrero vivía en un pequeño pueblo, y cierto día entro una víbora en casa del herrero que estaba buscando alguna cosa para comer y entonces comenzó a roer una lima que encontró.
Viendo esto la lima le dijo a la víbora:
- "Tonta porque me muerdes, no te das cuenta de que no me puedes destruir ya que yo poco a poco voy deshaciendo tus dientes"
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario