Las personas que no te aportan nada, o te limitan cuando empiezas a
luchar por tus sueños, no son más que parásitos de los que tendrás que
alejarte. Se denominan personas tóxicas,
y si se trata de individuos cercanos, muchas veces nos dejamos llevar
por sus opiniones y consejos, que a su vez nos alejarán de nuestra
propia felicidad. No debemos permitir que nadie trace el rumbo de
nuestras vidas, así que identificar a ese tipo de personas y alejarnos,
es un requísito imprescindible para eliminar las barreras entre uno
mismo y la felicidad. A veces, simplemente consideramos que no tenemos tiempo, o dinero, para
hacer lo que nos gusta y nos provoca placer. Creo que es la barrera más
pequeña a superar. Tenemos todo el tiempo que dura una vida para
aprender a administrar nuestros momentos de felicidad. Y en cuanto al
dinero, si bien es una gran ayuda para realizar nuestros sueños, debemos
verlo como la vía fácil y rápida, y al final, seguro que no nos
proporciona el mismo placer lograr algo de esa manera, que luchando
verdaderamente por ello.
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