Considero que una persona estalla en violencia, debido a un estado extremo de ansiedad que le provoca el no poder convencer, o doblegar al otro. Cuando no podemos cambiar los ideales o convicciones del otro, (y pensando que lograrlo sería algo imprescindible para nosotros), esa ansiedad extrema nos lleva a tratar de cambiarlo por la fuerza usando medios físicos o incluso psiquicos. El 12 de octubre en Barcelona, en unas de esas dos manifestaciones, algunos amenazaban con acabar la opinion de los demás, aunque fuese con la violencia, vamos que lo importante es que acabáramos pensando como ellos. Y si creemos tener una urgencia de cambiar los ideales de los demás, es porque los consideramos peligrosos para nosotros. Pero donde está el peligro de unas urnas?. Este día de nuevo la mayoría silenciosa de la que habla García Albiol, Díaz Fernandes o Alicia Camacho quedo reflejada en una de unos 5 mil y en otra fascista y que procalamaba acabar con los independentistas por lo civil o lo criminal, unos 200 y tirando alto. Las mayorías no se demuestran en las manifestaciones, se demuestran democráticamente en unas urnas. Por que si fuera por manifestaciones solo con ver lo que pasa el 11S, estaría ya ganadas. Por desgracia, hoy en día, la guerra, el ataque por cuestiones de raza, etnia, por razones políticas o por religión separan al mundo logrando que todos los días al encender la televisión y consumamos estos hechos como unos actos que hasta parecen ser parte del ideario colectivo. Incluso podemos ver como un candidato a la presidencia de los USA, llega a considerar que las mujeres y los ciudadanos de otras etnias son inferiores a los que como él son hombres y blancos. Por suerte a día de hoy, la inmensa mayoría no piensa como él, pero estos son los que crean violencia en la sociedad, porque no pensamos como ellos y creemos en esa igualdad.
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