sigo despierto
el suave viento nocturno,
me susurra y me trae tus recuerdos.
Esas lágrimas derramadas
por tu ausencia eterna.
Solo pasa el tiempo,
pero es solo un lamento lángido
Solo los recuerdos alegres
del ayer calman la tempestad
del amanecer un latido
con un ¡Te quiero!
Corazón roto por tu ausencia
solo los latidos se escuchan
en el silencio
¡Y sigo recordandote, cada noche!
Cuando nuestro amor era ciego,
y vi en tus ojos la felicidad eterna.
Jugamos con ese fuego
del alma, esa pasión que nos brindo su calor,
y nos terminó quemando.
¿Como se olvidar el ayer?
¿Y esa noche que vimos amanecer?
Después de la tempestad, llego el amanecer,
solo quedo mi corazón en el silencio
y latiendo que se escucha diciendo ¡Te quiero!
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