Soprende como cambiamos nuestra forma de ser, a menudo que crecemos. Cuando éramos niños y queríamos aprender a montar bicicleta o correr con patines... Muchas veces nos caíamos, nos levantábamos y continuábamos intentándolo hasta adquirir la habilidad precisa, que nos habíamos propuesto para aprender a no caernos de la bici, a no resbalar con los patines.
Ahora de adultos tal vez hemos olvidado un poco como se siente ser niños, y prestamos demasiada atención a los resultados y lo que pudieran pensar los demás sobre nosotros de esas derrotas que sufrimos. Perdemos esa "inconsciencia"que teniamos de crio y que nos hacía olvidar el miedo, ahora tras un fracaso, tenemos miedo a ese miedo a caer y no ser capaces de levantarnos. Deberiamos volver a ser aquel crio y disfrutar sin miedo a los cambios, disfrutando del camino y sintiéndonos felices por cada paso conseguido, asi podremos manifestar toda nuestra capacidad para obtener el mayor nivel de bienestar posible y aprender de esos errores cometidos que nos han hecho caer de la bicicleta o resbalarnos con los patines. Es como si a medida que crecemos, nos volviesemos más inmaduros. Debemos aprender a aprender, cambiar y crecer, (a pesar de las caídas), por medio de las experiencias que se presentan en nuestras vidas. Solo así podremos tomar la iniciativa y asumir la responsabilidad de hacer que las cosas sucedan. como esperabamos aprendiendo de esos errores y levantandonos para corregirlos... como en su día aprendimos a montar en bici y con los patines, de las heridas siempre se aprenden a realizar mejor las cosas
Ahora de adultos tal vez hemos olvidado un poco como se siente ser niños, y prestamos demasiada atención a los resultados y lo que pudieran pensar los demás sobre nosotros de esas derrotas que sufrimos. Perdemos esa "inconsciencia"que teniamos de crio y que nos hacía olvidar el miedo, ahora tras un fracaso, tenemos miedo a ese miedo a caer y no ser capaces de levantarnos. Deberiamos volver a ser aquel crio y disfrutar sin miedo a los cambios, disfrutando del camino y sintiéndonos felices por cada paso conseguido, asi podremos manifestar toda nuestra capacidad para obtener el mayor nivel de bienestar posible y aprender de esos errores cometidos que nos han hecho caer de la bicicleta o resbalarnos con los patines. Es como si a medida que crecemos, nos volviesemos más inmaduros. Debemos aprender a aprender, cambiar y crecer, (a pesar de las caídas), por medio de las experiencias que se presentan en nuestras vidas. Solo así podremos tomar la iniciativa y asumir la responsabilidad de hacer que las cosas sucedan. como esperabamos aprendiendo de esos errores y levantandonos para corregirlos... como en su día aprendimos a montar en bici y con los patines, de las heridas siempre se aprenden a realizar mejor las cosas
No hay comentarios:
Publicar un comentario