Los humanos cada vez hablamos más y escuchamos menos. Esto explicaría la aparición de esas "escuelas" donde se enseña a escuchar. El telón de fondo de mi refelxion radica en si las dificultades para leer profundamente (en lugar de superficialmente...). La comunicación es: hablar y escuchar, entendida ésta como el proceso de dar y recibir información, lo cual hacemos a través del lenguaje. De esta forma expresamos nuestros pensamientos y nuestras emociones. La mayoría de las veces generalizamos, omitimos, y distorsionamos lo que queremos decir, lo cual altera la conversación. Por desgracia utilizamos en demasía palabras como "nadie", "todo el mundo", "nunca", "siempre", "jamás"; esto hace que no expresamos exactamente lo que queremos, bien porque guardamos algunos elementos o los deformamos. Decimos, "dame eso" o "es una persona difícil". Luego esta que algunas personas tratan a otro como si fuera idiota y si se la devuelves, los ofendidos son ellos. Trato a los demás como ellos me tratan, si podemos debatir es mejor, pero si insultan no deben esperar a que ponga la otra mejilla y antes de esperar un tiempo, prefiero devolverla en caliente. Pero recordemos que al escribir, uno se habla a sí mismo lo que después escribirá para otro, y escucha de sí mismo lo que luego leerá el otro. Y en el leer, uno se habla a sí mismo con el lenguaje escrito por otro, y escucha de sí mismo lo que pensó el otro. Por lo tanto, el hablar y el escuchar se presentan como los dos polos opuestos de los siguientes movimientos lingüísticos: del pensar, del conversar, del escribir y del leer.
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